En Marzo del 2022 se reportó que el estado de Puebla ocupaba el primer lugar nacional como la entidad con mayor discriminación y vulnerabilidad en contra de su población, sin importar el grupo social al que pertenece, con 28.4 por ciento, así lo dio a conocer el Instituto Nacional de Geografía y Estadística (INEGI) para la siguiente medición pasamos al segundo lugar, pero no porque mejoramos, sino porque hay estados que nos superaron, nosotros incluso sumamos 2% al porcentaje anterior, es decir, no mejoramos empeoramos, esto es un indicativo que el País se descompone en materia de discriminación, no se trata solo de un mal trato, existen diversas consecuencias como pueden ser: 1. dificultad para el libre acceso a la educación, salud, trabajo, programas sociales. 2. Se establecen diferencias salariales, prestaciones sociales, condiciones laborales. 3. Se impide en muchos casos el ejercicio pleno de los derechos reproductivos. 4. Se niega la participación en asociaciones civiles y políticas de manera equitativa. 5. No se tiene acceso a cargos representativos o del servicio público por cuestiones de origen étnico o procedencia, orientación sexual y género. 6. Se inhiben nuevas inversiones al proyectar la percepción de ser una sociedad que no garantiza la participación de todos los sectores en las actividades económicas locales.
El Comité para la Eliminación de la Discriminación Racial de las Naciones Unidas dentro de las recomendaciones para México de fecha 25 de abril de 2024, exhorta a lo siguiente:
a) Continuar sus esfuerzos para lograr que el Consejo Nacional para Prevenir y Eliminar la Discriminación cuente con los recursos humanos, financieros y técnicos adecuados a fin de que cumpla su mandato de manera efectiva;
b) Fortalecer la capacidad institucional del Consejo Nacional para Prevenir y Eliminar la Discriminación y garantizar una representación adecuada de los pueblos indígenas y las personas afrodescendientes a fin de que pueda incrementar la confianza y dar un tratamiento efectivo a las quejas relativas a la discriminación racial;
c) Elaborar una política nacional integral de lucha contra la discriminación racial que incluya la adopción de un plan nacional contra el racismo y la discriminación, con la participación efectiva de Pueblos Indígenas, afrodescendientes, así como de otros grupos minoritarios que continúan enfrentándose a la discriminación racial, por medio del Consejo Nacional para Prevenir y Eliminar la Discriminación, como ente encargado de generar y promover políticas para la prevención y eliminación de la discriminación;
e) Establezca mecanismos adecuados de coordinación entre las instancias y autoridades públicas tanto a nivel estatal como federal que tienen un mandato de prevención y eliminación de la discriminación racial;
f) Continúe difundiendo información sobre la legislación relativa a la discriminación racial e informe a la población dentro de su territorio sobre el mandato, funciones y actividades del CONAPRED a fin de aumentar su visibilidad y el conocimiento sobre su mecanismo de quejas”.
Pero en Puebla las cosas van en sentido contrario y no hablo solo del sector público, sino del privado, de la empresa, sociedad civil y academia, nada estamos haciendo para revertir esto que se está viviendo en nuestro Estado, la mayoría están volteando a otro lado y eso es grave, aquí algunos ejemplos:
- La Comisión de Derechos Humanos de Puebla (CDH Puebla), esta misma donde el titular como algunos directivos y exdirectivos, visitadoras y visitadoras dicen retendrán el poder, porque según sus influencias les permiten controlan la relatoría con el gobernador que se va y que ya tienen la bendición del que llega, que su mejor activo es seguir sin hacer nada por los derechos humanos en el Estado y mucho menos por combatir la discriminación, esta misma Comisión tan influyente y poderosa tuvo el desatino internacional que el 27 de mayo del 2024 un mes después que el Comité para la Eliminación de la Discriminación Racial de las Naciones Unidas, exhortara a México a tomar diversas medidas en contra de la discriminación, hiciera todo lo contrario, se negaron atender el peor y más grave caso de discriminación que se vivió en Puebla en la pasada campaña electoral, recuerdan el escándalo de los “Morenacos” y Eduardo Rivera Pérez, líder de la derecha y la oposición en el Estado de Puebla.
Pues derivado de lo anterior se presentó la queja con el expediente 3756/2024 asignada a la primera visitaduría de la CDH Puebla, cabe precisar que en Puebla no está activo el Comité para Prevenir y Eliminar la Discriminación ni existe una instancia encargada de recibir quejas que dañen la dignidad de los derechos humanos, ni mucho menos instancia que promueva políticas y medidas tendientes a la eliminación de la discriminación racial, como lo es a nivel nacional el Consejo Nacional Para Prevenir la Discriminación (CONAPRED), la CDH Puebla sabedora de todo lo anterior y reunidos todos los visitadores y los directores más influyentes de la Comisión, deciden remitir la queja a la CONAPRED, haciendo evidente el interés de los titulares y directivos de esta Comisión de apoyar a Eduardo Rivera Pérez y estar en contra de quien viene impulsando el humanismo mexicano en el Estado y lo más grave es, que no están interesados en combatir la discriminación en el Estado de Puebla, a pesar de existir un exhorto internacional de que los estados lo atiendan.
2.- La pasada Legislatura que cerro sus trabajos a mediados del mes de septiembre del 2024, dejo en grave indefensión al Poder Ejecutivo Estatal, al nunca haber cerrado el ciclo de la convocatoria que se abrió para designar a los 3 representantes de la sociedad civil del Comité para Prevenir y Eliminar la Discriminación y estar en condiciones de integrar al Comité, siendo urgente y necesario que la nueva Legislatura, convoque a la brevedad pues es requisito urgente y necesario para la realización de los trabajos ordenador en la Ley para Prevenir y Eliminar la Discriminación del Estado Libre y Soberano de Puebla.
Para Puebla que estamos históricamente en los dos primeros lugares de los estados que más discriminan del País, así como la reacción evasiva y de nula atención de las instancias de derechos humanos en el Estado para combatir la discriminación en el Estado y tomando en cuenta el enfático exhorto que recibe el estado mexicano por parte del Comité para la Eliminación de la Discriminación Racial de las Naciones Unidas de “Intensificar sus esfuerzos para que cada entidad federativa cuente con una instancia encargada de recibir quejas relativas a la discriminación racial y de promover políticas y medidas tendientes a la eliminación de la discriminación racial”, es necesario que tomemos con seriedad y busquemos prevenir este lamentable flagelo que tanto esta dañando a quienes vivimos en el Estado de Puebla, toda vez que
Por lo anterior es necesario crear el Instituto Estatal para Prevenir y eliminar la Discriminación en Puebla (IEPREDPue), que logré cumplir con los exhortos internacionales y alineados a la política nacional, esta unidad administrativa deberá intensificar esfuerzos para que Puebla sea quien reciba quejas relativas a la discriminación de todo tipo y no solo para un sector de la población, así como la construcción de políticas públicas tendientes a promover acciones enfocadas a la eliminación de todo tipo de discriminación en el Estado de Puebla. Así mismo servirá como la Instancia generadora de estadística local, consultora para estudios e investigaciones, promotora de la atención transversal de los sectores vulnerables, así como estudios e investigaciones. El instituto ayudará a fortalecer el ejército pleno de los derechos humanos en la entidad y propiciará la coordinación interinstitucional para la generación de políticas públicas para prevenir y eliminar la discriminación. Para lograr salir del segundo lugar nacional en discriminación.
Se debe promover la creación de una instancia que cumpla los lineamientos del Programa Nacional para la Igualdad y la No Discriminación (PRONAIND) 2021-2024, y que promueva los nuevos programas de la siguiente administración federal y local. Así como generar el intercambio de información y buenas prácticas con el CONAPRED, por ejemplo, para desarrollar un Atlas estatal de la discriminación, dando cumplimiento desde lo local con el exhorto realizado por el Comité para la Eliminación de la Discriminación Racial de las Naciones Unidas.